Y se fue Abril con sus vacaciones, sus cambios dramáticos de clima y el día del niño y su Boda Real, aún no se nos quitaba la jaqueca de la Boda y nos alcanzó Mayo, con la Beatificación de Juan Pablo II. Aún no asimilábamos que el Ex-Papa, era ya Beato y escuchábamos de los desfiles deslucidos del Día del Trabajo. Ah! empezaba a extrañar la parafernalia de Fidel Velazquez cuando llega Obama y dispara la noticia de la muerte de Osama...
Bonita forma de empezar el 5to mes del año, Osama por allá, Obama por acá... Cincou di Maiou y todo vuela, todo vuela y nada se detiene.
Esta inmediatez de la que somos víctimas en ocasiones nos evita disfrutar de los placeres sencillos, disfrutar de una charla, un buen café, la sonrisa de una persona. He comprendido que permitirnos esos placeres son cosas que pocos tenemos el gusto de poder hacer.
¿Tu recuerdas la última ocasión en que te deleitaste con algún placer sencillo?
Y ya viene uno de los más comerciales días del año, el 10 de Mayo, día en que toda Madre es recordada, y muchas de ellas terminan cansadas, molestas y con ganas de no volver a tener un 10 de Mayo. Las flores ya incrementaron su precio, los chocolates cuestan más, las galletas, los restaurantes... y nuestras Madres ya empiezan a escuchar por todos lados la famosa canción "a ti te dedico mi historia, shalala shalalala"
Y ellas solo guardan con grato recuerdo detalles llenos de significado que puede ir desde una foto hasta una carta o un papelito donde alguna ocasión le escribimos "Mami" ... ellas saben disfrutar de los placeres sencillos.
Yo por lo pronto iré a disfrutar de uno de los placeres más sencillos, más deliciosos y en ocasiones más complicado de disfrutar... el sueño.